Algunos ejemplos de actividades de relajación son:
Masajes por parejas: Nos agrupamos por parejas y un niño hace de masajista y el otro será el que recibe el masaje. El masajista hará caricias al otro niño siguiendo el recorrido de la cabeza a los pies. Podemos utilizar materiales como pelotas de goma-espuma, tiras de papel pinocho, plumas, peluches... que ayuden a los niños a sentirse cómodos y relajados. Después de unos minutos se cambiarán los papeles.
Las marionetas: Los niños se identifican con una marioneta movida por hilos que sujetan cada una de las siguientes articulaciones: dedos, muñecas, codos, hombros, cuello, cadera, rodillas. A indicaciones del maestro, los diversos hilos se van rompiendo, adoptando los niños una actitud corporal determinada.
Los rodillos: Esta actividad puede realizarse de forma individual o por parejas. En la modalidad individual es el niño el que, tumbado en una colchoneta, tiene que rodar sobre sí mismo. Por otra parte, en la modalidad de parejas, uno de ellos se tumba en la colchoneta con los músculos de su cuerpo totalmente relajados y será un compañero o compañera quien le haga rodar.